El monitor es especialmente bueno para teletrabajo y poder tener varias apps y ventanas abiertas en un mismo vistazo.
¿Necesitas un nuevo monitor para teletrabajo, o para el nuevo curso académico? Yo llevo usando 3 meses el Samsung Viewfinity S5 y estoy encantado. Lo compré en su día en la web oficial donde tiene un precio hoy de 279 euros, pero hoy cuesta solo 239 euros en Amazon. Si trabajas en casa, este monitor te va a ayudar en temas de productividad, y si lo haces para estudiar, tendrás de un vistazo todo el contenido que buscas para ese trabajo que se te atasca.
Este monitor de Samsung es de tipo ultrapanorámico, es decir, tiene una relación de aspecto de 21:9. Es la práctica es como si compras dos monitores de 24 pulgadas y los pones pegados, más o menos. Puedes tener abiertas 2 ventanas, o incluso 4, y ver todo el contenido de un vistazo. Al cabo del tiempo las 34″ de diagonal no son tan grandes y estaría dispuesto a aumentar hasta 43″.
Samsung Viewfinity S5 (34″)
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La primera sensación que te viene a la mente cuando enciendes y comienzas a usar este monitor la de estar ante una gran pantalla. Fuera de lo común, en esta pantalla no es recomendable ver vídeos en pantalla completa, a no ser que estén grabados en 21:9 de forma original. Es más bien un panel para abrir dos ventanas o apps al mismo tiempo y poder trabajar con ellas.
La productividad en estos últimos meses ha aumentado, a título personal, pues puedo tener varios navegadores abiertos que me aportan información al mismo tiempo sin tener que moverme entre pestañas o ventanas, lo tengo todo en un vistazo. Además este panel tiene una gran resolución de 3440 x 1440 píxeles, para que cualquier cosa que tenga abierta la ves con la máxima nitidez.
Uno de los aspectos que no suele estar presente en un monitor hecho para teletrabajo y estudio es su tasa de refresco. Suele estar en los 60 Hz como norma, pero en este modelo tenemos hasta 100 Hz. Esto nos va a aportar un menor cansancio ocular si pasamos muchas horas frente a la pantalla.
Su brillo de 300 nits típicos es ideal para trabajar con este monitor en interiores, que es para lo que está destinado. Si no queremos sumar nuestras retinas, es mejor que el brillo del panel esté controlado y no se exceda demasiado. Por otro lado, cuenta con compatibilidad con HDR10, para poder visualizar tanto imágenes como escenas oscuras con una claridad bestial.
En la parte trasera tenemos una serie de puertos que nos va a permiten conectar varias fuentes al mismo tiempo al monitor. Hasta tres dispositivos podemos tener conectados gracias a los 2 puertos HDMI y al DisplayPort incluidos. También incorpora un puerto de auriculares. Yo, personalmente, tengo conectados un MacBook Pro y una torre PC con Windows en ambos HDMI. Cuando necesito trabajar en un sistema puedo cambiar de fuente rápidamente.
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Por último, en la parte central inferior del monitor tenemos los controles en forma de botones físicos con tacto gomoso. Con ellos, además de cambiar de fuente con premura, podremos ajustar la configuración de brillo, contraste y demás de forma que tengamos el monitor y cada salida personalizada a cada fuente.
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Autor: JuanMi Guirado
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