El robo fue perpetrado por un ex-ejecutivo de alto rango de Samsung, que tiene ahora 65 años y ha sido ya detenido en Corea del Sur.
Hoy os traemos una noticia importante que tiene mucho que ver con el espionaje industrial, y que además afecta a un gigante del mercado móvil como Samsung que se ha visto envuelto y afectado por el robo de secretos comerciales para construir una planta de imitación que replicase su tecnología dentro de las fronteras de China.
Nada tiene que ver eso sí con los nuevos móviles que Samsung tiene en el horno para el Unpacked de este verano, plegables Galaxy Z de quinta generación incluidos, pues tal y como nos contaban algunos medios surcoreanos lo cierto es que el robo de información aplicaba a la división de chips y semiconductores del fabricante surcoreano.
Lo más curioso es que el principal detenido no es un empleado cualquiera de una de las plantas de fabricación del gigante Samsung, sino más bien un antiguo ex ejecutivo de alto rango de la compañía, que ha sido arrestado ya en Corea del Sur y acusado de espionaje industrial y robo de secretos comercial con el fin de replicar en China una fábrica de chips idéntica a la de Samsung.
Este hombre tiene 65 años ahora mismo, y aunque no se conoce su identidad sí sabemos que será procesado por violar las leyes de protección de tecnología industrial y prevención de competencia desleal de Corea del Sur, siempre según ha informado la Oficina del Fiscal del Distrito de Suwon, en Seúl.
Por supuesto no trabajaba sólo, pues en este caso se acusa también a otras seis personas entre las que se incluyen un empleado de una subcontrata de Samsung y cinco personas más, que son trabajadores de una empresa fabricante de chips que este ex-ejecutivo habría establecido en China. Obviamente, estos últimos no están detenidos.
La información robada es importantísima, pues se incluyen hasta los datos de ingeniería básica de la planta de chips (BED) junto con los planos de diseño del proceso, desde 2018 hasta 2019 al menos. Esta tecnología BED es necesaria para garantizar que no existan impurezas en las instalaciones, algo sumamente importante en la manufactura de semiconductores.
Este antiguo ejecutivo de Samsung habría contratado ya 200 personas, sobre todo de Samsung y SK Hynix, instruyéndoles para conseguir y usar los datos de Samsung con el fin de replicar una fábrica de producción de chips.
Samsung ya está produciendo chips de 3 nanómetros en sus plantas.
Además, se habían robado también secretos esenciales para la fabricación de chips de memoria flash DRAM y NAND, que se consideran en Corea del Sur tecnologías centrales nacionales y por tanto están protegidas.
Hay más en todo caso, pues el ex-ejecutivo ya habría producido durante el año pasado algunos productos de prueba que se aprovechaban de la tecnología de Samsung en la ciudad de Chengdu, por lo que habría recibido una inversión de unos 340 millones de euros por parte de mecenas chinos.
La fábrica que pretendía implantar ahora, usando la tecnología robada, estaba además a sólo kilómetro y medio de la planta que Samsung tiene en Xian, al oeste de China, aunque todo explotó cuando un inversor taiwanés retiró su inversión dejando el proyecto en el aire.
Los daños que ha recibido Samsung se estiman en unos 300.000 millones de wones por la filtración de información, así que probablemente este juicio le vaya a salir muy caro a este antiguo directivo que se ha complicado la jubilación… ¡Cosas veredes!
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Autor: Damián García