Algunos planetas tienen condiciones geológicas y atmosféricas verdaderamente increíbles
Hasta ahora, los diamantes son uno de los minerales más difíciles de conseguir en nuestro planeta. Son escasos, caros y no hay material más fuerte que él. Así, aparte de en joyería, también se usa en tecnología de forma masiva, por lo que a veces aparecen diamantes muy valiosos que nos dejan a todos sorprendidos.
Pero ¿qué pasaría si en un planeta llovieran diamantes? Pues resulta que no es extraño, al contrario, es un fenómeno común fuera de nuestro planeta, sobre todo en el caso de los gigantes gaseosos.
Un hallazgo sorprendente
Imagina un mundo donde las lluvias son de diamantes y no de agua como en el nuestro. Este escenario, sacado de una de las mejores películas de ciencia ficción, podría ser una realidad en la lejana atmósfera de Neptuno. Un estudio reciente publicado en la prestigiosa revista Nature realizado por un equipo internacional de investigadores sugiere que la lluvia de diamantes es un fenómeno que podría ocurrir comúnmente en el universo, especialmente en planetas gigantes gaseosos como Neptuno y Urano, algo que en nuestra cabeza puede sonar absolutamente sorprendente pero que allí sería el día a día natural.
En las profundidades de estos planetas, las condiciones extremas de temperatura y presión descomponen los hidrocarburos, como el metano. Este proceso libera átomos de carbono, que, bajo tales circunstancias, se agrupan para formar diamantes en estado completamente sólido. Estos cristales, luego, caerían como lluvia a través de las densas capas atmosféricas del planeta.
Los experimentos de laboratorio, replicando estas condiciones extremas, han revelado algo sorprendente: la formación de diamantes podría requerir temperaturas y presiones más bajas de lo que se pensaba anteriormente. Por ello, no solo nos encontramos con que podemos aprender más sobre los gigantes gaseosos del universo, sino que además estamos descubriendo nuevos detalles sobre la formación de diamantes que nos podrían ser muy útiles.
Este diamante acaba de ser descubierto y ya vale una gran fortuna
Una gran importancia de cara al futuro
Este fenómeno, más allá de su belleza, podría influir en la estructura y el comportamiento de los campos magnéticos de estos planetas. A diferencia de la Tierra, cuyos campos magnéticos son más simétricos, Neptuno y Urano presentan irregularidades que han confundido a los científicos durante años. La presencia de diamantes en su interior podría ser la clave para descifrar estos enigmas y desentrañar cómo funcionan realmente.
Así, la lluvia de diamantes, más que un espectáculo increíble y que nos cuesta imaginar, representa una pieza fundamental para comprender los misterios de nuestro sistema solar y más allá que nos +hacen fantasear con futuras exploraciones espaciales*.
Aunque, ahora bien, también nos hace sacar nuestro lado más avaricioso y nos permite preguntarnos si una compañía de minería planetaria podría servirnos para acabar con la escasez de uno de los materiales más demandados de nuestro planeta.
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Fuente info
Autor: Esteban García Marcos