Los motores eléctricos no estaban triunfando en la aviación: ahora este motor futurista va a cambiarlo todo

Podríamos estar ante el futuro de una industria que ha atravesado problemas para ser sostenible.

La carrera constante por electrificar todos los medios de transporte dio su pistoletazo de salida hace décadas, pero no es hasta ahora cuando se han empezado a lograr grandes éxitos en estas cuestiones. Los coches eléctricos tienen muchos seguidores, mientras que otras alternativas sostenibles han ido eclipsando otros vehículos, como los trenes de hidrógeno y la levitación magnética. Sin embargo, la aviación siempre ha tenido más problemas para lograr una fuente de energía menos contaminante. No es algo extraño, al fin y al cabo es un medio bastante complejo y necesita una potencia bruta incuestionable.

Ahora, un nuevo motor parece dispuesto a cambiar las reglas del juego para siempre. Se trata de una invención prácticamente futurista que tiene por objetivo modificar los estándares a la hora de volar y lograr una eficiencia máxima junto con la potencia de los motores clásicos de combustión.

El nuevo motor eléctrico para aviación

Duxion Motors ha probado con gran éxito su nuevo eJet: el primer motor eléctrico de propulsión de todo el mundo. Se trata de una apuesta realmente innovadora por parte de la firma canadiense para lograr una innovación en tecnología que hasta ahora no se había logrado. Así, estamos ante un motor realmente compacto que puede hacer realidad los sueños de la industria de conseguir el fin de las emisiones de CO2 a la atmósfera.

Actualmente todas las empresas de aviación están lidiando con el mismo problema: sus motores contaminan demasiado, lo que ha generado que los vuelos se encarezcan debido a que tienen que compensar su huella de dióxido de carbono. Por este motivo, llevan décadas trabajando en una alternativa que parece que por fin ha llegado de la mano de duxion.

Así, estamos ante un motor llamado rim-driven fan o RDF por sus siglas en inglés y que lleva tratándose de producir desde mediados del siglo pasado. En este caso, las aspas se adhieren a la estructura del avión formando un rotor totalmente completo como señalan en Novaceno. Este sistema es mucho más eficiente, pero además se gana en silencio y sencillez de uso.

La buena noticia, es que su rendimiento es excelente, equiparándose sin problema al de los motores que utilizan combustibles no renovables. Pero es que además es más fácil de mantener ya que es más sencillo y puede incorporarse en grandes aviones de pasajeros.

Así, estamos ante un pionero en lo que serían los vuelos sin emisiones del futuro. Una apuesta verdaderamente ambiciosa e interesante que podría permitirnos volar de forma más sencilla y barata.

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