Tenía que pasar: llegan las llamadas fraudulentas con voces generadas por IA

En medio de toda la locura de la IA, ya tardaban en aparecer quienes la usasen para fines poco claros. En Estados Unidos está siendo todo un problema.

Estamos en mitad de una locura por la inteligencia artificial. GhatGPT se ha convertido en un auténtico furor, hasta el punto de que se puede añadir a WhatsApp y Microsoft lo ha integrado en Bing. Hasta el Gobierno de Rumanía ha desarrollado una IA que atenderá las quejas de los ciudadanos y la ha incluido en su estrategia política.

También hace poco sabíamos que Samsung iba a permitir clonar la voz del usuario para responder llamadas por él gracias a la IA y, en medio de toda esta vorágine, faltaba alguien que se aprovechase de la IA para fines poco claros. Según podemos leer en Android Authority, están produciéndose llamadas fraudulentas de IA que imitan la voz de familiares y amigos de la víctima.

Más de 36.000 casos sólo en 2022

Según el medio, miles de víctimas están denunciando que han sido duplicadas por impostores que fingían ser seres queridos. Este tipo de estafa se ha convertido en el segundo tipo de fraude más popular en Estados Unidos, con más de 36.000 casos reportados en 2022. De ese total, más de 5.000 víctimas perdieron dinero a través del teléfono. El total en pérdidas económicas se eleva a 11 millones de dólares.

De todos estos casos hay una historia que es particularmente chocante: una pareja de ancianos enviaronn 15.000 dólares a través de una terminal de bitcoin a un estafador después de creer que hablaban con su hijo. La voz generada por IA los convenció de que su hijo estaba en problemas legales después de matar a un diplomático estadounidense en un accidente de coche.

Parece ser que estos ataques, de hecho, se centran en gente de avanzada edad. No resulta sorprendente, ya que las personas mayores son las más vulnerables en lo que a estafas financieras y nuevas tecnologías se refiere. Por desgracia, los tribunales estadounidenses no han decidido todavía si las empresas pueden ser consideradas responsables por los daños causados por estas estafas.